En los últimos años se ha producido un cambio en el estilo de vida debido al aumento de la producción de alimentos procesados y a la rápida urbanización. Esto, a su vez, ha producido cambios en la dieta ya que se consumen alimentos más calóricos con niveles elevados de grasas, colesterol, azúcares y sal, reduciendo a su vez el consumo de frutas y verduras.
Siguiendo las recomendaciones de la OMS hay una serie de consejos para conseguir un estilo de vida saludable:
- Mejora en la dieta
Promocionar el consumo de frutas y verduras (unos 400 gramos al día o 5 porciones) para reducir el riesgo de padecer enfermedades no transmisibles y garantizar el consumo de fibra. Aumentar el consumo de productos integrales (cereales, arroz, pasta) para mejorar el tránsito intestinal y el fortalecimiento de la flora.
Disminuir la ingesta de azúcares libres a menos del 10% de las kcal totales, lo que contribuiría a reducir la aparición de sobrepeso y obesidad, y de padecer enfermedades cardiovasculares. Esto se conseguiría reduciendo el consumo de bebidas azucaradas, bollería industrial y sustituirlos por una pieza de fruta.
Reducir el porcentaje de grasas a menos del 30% de las kcal totales, promocionando las formas de cocinado como vapor o plancha en vez de fritos, rebozados o precocinados.
Y reducir el consumo de sal (a menos de 5 gramos al día) ayudaría a disminuir el riesgo de enfermedades coronarias y de accidentes cerebrovasculares.
- Reducir el consumo de alcohol y tabaco
Se aconseja el consumo de una copa de cerveza o vino al día como máximo, quedando el resto de bebidas alcohólicas desaconsejadas.
- Realizar, al menos, 30 minutos de actividad física al día
Esto promociona la pérdida de peso, fortalecimiento de los músculos y huesos, reducción del estrés, ayuda a dormir y control del colesterol, tensión arterial y de la glucosa en sangre.
- Salud mental
Mejora el bienestar mental, reduce los síntomas de ansiedad y estrés, mejora el sueño y reduce el riesgo de depresión. Además, aumenta la percepción de bienestar y satisfacción con el propio cuerpo.
Nota: Dado que el historial de salud y las necesidades nutricionales de cada persona son muy diferentes, asegúrese de hablar con su médico y un dietista registrado para obtener consejos sobre la dieta y el plan de ejercicios adecuados para usted.